Ha finalizado con un marcador de 3-2 un partidazo para cerrar la llave entre el Real Madrid y el Chelsea. El equipo español finalmente logro el gol de la victoria en tiempos extra ante un Chelsea que nunca se rindió, que llego al mítico estadio blanco a dar la cara y luchar por la clasificación hasta el final. Pero con un Madrid que, de la mano de su estelar, Karim Benzema sufrió una derrota, pero logro la clasificación a las semifinales de Champions League.
El partido inicio con la presión constante del Chelsea en el marco de Courtois, que temprano en el partido se vio perforado por un golazo de Mason Mount, que con un sublime toque de derecha fusilo al portero y daba esperanza a un equipo blue que hacía creer a la afición. El gol hizo que el Chelsea se acomodara más en el encuentro, teniendo dominio absoluto del balón mediante dominio de balón, tiros a larga distancia y presión en la salida, generando perdidas en zonas comprometidas al conjunto merengue. Así finalizo el primer tiempo del partido, con un Chelsea dominante y un Madrid que se salvó y que buscaba salir del agujero en que se había metido.
El segundo tiempo arranco de la misma manera que el primero. Con un Chelsea que imponía. Con un futbol de coberturas y transiciones largas, el Chelsea de visita era más. Fue mediante un gol de cabeza de Antonio Rudiger, de un soberbio partidazo que cae el 2.do gol. Llegaba el empate en el marcador global y un equipo madridista que parecía no responder.
El Chelsea no paraba de ejercer presión, buscando el 3.er gol que le diera la clasificación directa a las semifinales que finalmente llego. Después de un error en la salida, un pase a profundidad de Mount y Timo Werner, que con mucha clase se abrió espacio dejando en la lona a múltiples rivales para fusilar a Courtois, que a pesar de haber tenido contacto con el balón no pudo detener la definición del alemán que daba la clasificación directa al conjunto de inglés. Llegaba el 3-0 y el frío de Londres se hacía sentir en el Bernabéu, y la clasificación se le escapaba al Madrid.
Pero no se puede dar por vencido al equipo merengue, que no defrauda cada oportunidad que tiene para mostrar por qué son los máximos ganadores de esta competencia. El entrenador del Madrid realizo cambios, dando entrada a Marcelo y Rodrygo. Se jugaba el minuto 80 cuando el motor croata Modric coloco un perfecto pase a 3 dedos al brasileño Rodrygo, que vacuno el arco blue y daba la paridad al Madrid, que con ese gol regresaba al encuentro. Esto mandaba el encuentro a tiempos extra, con la ventaja anímica a favor del equipo que jugaba en casa.
Los ánimos cambian en un estadio con el Bernabéu con este tipo de jugadas. La hegemonía, la garra y la clase de los jugadores merengues se vio reflejada en el inicio del tiempo extra y los nervios del equipo de visita se sintieron, al ver como el encuentro que por mayor parte de los 90 minutos habían logrado controlar, se les salía de las manos.
Se jugaba el primer tiempo extra, con un Madrid más cómodo en el campo y un Chelsea que intentaba despertar después del gol merengue, pero que aún no encontraba salida del embrollo en que se había metido. Fue Karim Benzema, si, el mismo de siempre el que logro el gol del desequilibrio. Jugada por la izquierda, con un Kante que perdió el balón en la salida y Modric dando un pase en profundidad a Vinicius, que corrió toda la banda para asistir al ariete francés que no perdona nunca y dio al partido el batacazo. 3-2 a favor del equipo de Londres, que a pesar de llevar la ventaja en el partido se veía eliminado por los goles recibidos en el primer juego.
El segundo tiempo extra se vio igual que el resto del partido, con un Chelsea que presionaba el arco merengue sin resultados en el marcador. Al final, el cuadro merengue logro congelar el partido, dando final con un marcador por 3-2 que dio como resultado un global de 5-4, dando la clasificación al Real Madrid a semifinales, en la que hasta el momento se da como la llave con más emociones en otra noche mágica por cuartos de final de Champions League.
